La
Habana, Cuba.Jueves 12 de Abril del 2013
Si la juventud cubana no está perdida,
que nos digan donde se encuentra y a que se dedican porque no logran movilizar
ni un tercio de los jóvenes para las tareas de los CDR, tampoco quieren ser
miembros de la Juventud Comunista a pesar de las presiones y prebendas, pero lo
peor de todo es que un gran número de jóvenes se encuentra presos en
condiciones alarmantes y desesperantes como el caso del joven enfermo de los
nervios Lázaro Daniel Andarcio Méndez en el campamento 16 perteneciente a la
tristemente célebre prisión 1580.
Lázaro está recluido desde el 17
de Enero del 2011 por el delito de peligrosidad social o asegurado como le
llaman las autoridades por tan solo realizar discursos políticos públicamente
contra el sistema y gobierno por vivir en la extrema miseria, muchas veces bajo
el efecto del alcohol, pero jamás ha tenido antecedentes penales que justifique
su encierro.
La madre Lidia Méndez López vive
desesperada porque su único hijo está enfermo de los nervios y se agrava cada
día por las condiciones penales donde se encuentra, ella ha tocado muchas
puertas institucionales, pero no solucionan su problema, según ella su hijo fue
dado de baja de las FAR por incompatibilidad con el servicio al ser atendido
por psiquiatría, pero en 2 años y 2 meses solo ha podido ver a un psiquiatra en
la 1580 y en dos ocasiones ha sido remitido a otros hospitales sin poder ser
atendido.
Este joven cubano está
desesperado porque lo han presentado en dos ocasiones al consejo de beneficio
para hacerle un cambio de medida y lo han desaprobado al parecer por
ensañamiento y por denunciar la triste realidad de la prisión. Lázaro trabaja
fregando platos en la cocina militar sin salario, dice que se siente explotado
y amenazado que de no hacerlo lo trasladan a un lugar conocido como el Quilombo
donde la explotación es doble y reprimen a los enfermos y a los ancianos que
tienen que trabajar obligados en la construcción o la agricultura por un
pedacito de Pan y un vaso de polvo de chocolate.
En esta prisión cuentan con un
solo teléfono para más de 200 reclusos, el desayuno diario es un pedazo de Pan
viejo con un poco de agua con azúcar, o el agua con que enjuagan las tinas de
helado que entran todos los días pero que ni los guardias ven el helado porque
se los lleva el Mayor Raúl jefe del campamento, e igual ocurre con el pedazo de
pollo que dan una vez al mes, se los llevan para fiestas en las playas y
trasiega dos tanquetas de sancocho diariamente para sus puercos y perros,
mientras los presos se desmayan por falta de comida.
El Primer Tte. Rolando Portales
atiende la Brigada de la construcción y golpea a los reclusos cuando no pueden
trabajar por enfermedad o les suspende los pases, y paga 18 centavos por
fabricar cada bloque y otros no cobran nada, pero ese oficial especula con
prendas de oro con el uniforme a la cara de todo el mundo en medio de tanta
pobreza.
Este joven tiene mareos todos los
días, mucho sueño, dolores de cabeza, apenas come, siente dolores en el pecho,
un stres constante y le vienen ideas malas a la cabeza, es alcholico, fuma y
sangra a cada rato por la nariz, necesita atención médica especializada y que
le aprueben el cambio de medida para salir de libertad porque le están violando
todos sus derechos penales y humanos elementales. A los asegurados no les
rebajan los dos meses al año, ni tampoco los otros dos por estudiar pero los
obligan a ir a clase que son un fraude con presos como maestros y obligados a
pasar a todo el mundo, una burla a la dignidad humana si al mismo tiempo te
explotan, torturan, reprímen y atentan contra la vida de todos los presos en Cuba,
comentó por escrito Lázaro Daniel Andarcio Méndez.
Por: Egberto Ángel Escobedo Morales
Periodista Independiente.
Blogg: apahabla
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